Prima garantizada o prima revisable: Las diferencias

  1. prima garantizada

Contratar una póliza de seguros con prima garantizada o prima revisable, puede resultar tortuoso para el cliente que debe enfrentarse a un glosario complejo y a una terminología técnica incomprensible, a veces ante la mirada impasible de un “asesor de seguros” que no considera necesario dedicar algo de tiempo a la educación financiera y en seguros de su cliente.

Siendo el propósito principal de nuestro espacio, formar una cultura aseguradora en Ecuador, a través de la educación en seguros. Es por ello que, el día de hoy, hablaremos sobre la prima garantizada y la prima revisable, su definición, sus características y su impacto en el valor final de una póliza de seguros.

Aunque la definición y las características de cada una de ellas, tienen una alta incidencia en el precio de la póliza, y el valor total que termina pagando el cliente, muchas personas optan por una de ellas, sin conocer realmente sus efectos ni sus características.

Antes de entrar en materia, conviene conocer la definición exacta de la palabra prima, en el ámbito de los seguros, y los elementos que la componen. Veamos:

La prima en seguros y los elementos que la componen

El valor que paga el cliente, para tener derecho a la protección y la tranquilidad que le brinda una póliza de seguros, se conoce como prima.

Usualmente la prima en seguros se paga en periodos mensuales. Sin embargo, a voluntad de las partes, puede ser pagada en forma bimestral, trimestral o anual.

Aunque la disyuntiva más común que se presenta a un cliente que desea contratar una póliza de seguros, está entre la prima garantizada o la prima revisable, lo cierto es que existen otros muchos tipos de prima: Ascendente, Decreciente, Nivelada, Total o de Tarifa, Única, Fija, Variable, Extra prima…

Por lo pronto, y antes de enfocar nuestra atención en la prima garantizada y la prima revisable, veamos cuales son los elementos que permiten establecer el valor de una prima:

El costo que representará pagar al asegurado, la suma equivalente a la indemnización.

Este valor se determina dividiendo el número de seguros que cuentan con cobertura sobre determinado riesgo, sobre el número de siniestros pagados en un período de tiempo.

Citemos un ejemplo para entenderlo mejor: Si las estadísticas de robo a negocios se disparan en una ciudad como Quito, el valor de las primas de seguros con cobertura para robo, aumentará en la misma proporción.

Los costos administrativos en los que incurre la aseguradora para desarrollar su actividad.

La sumatoria de salarios, gastos de oficina, papelería, transportes, servicios públicos y otros, se distribuye proporcionalmente entre los contratos de seguros vendidos.

Las aseguradoras más eficientes en el manejo de sus recursos, que, con menos inversión, logran captar mayor número de clientes, pueden ofrecer primas más baratas que sus competidores.

Lee más sobre este tema en nuestro artículo: Costos del seguro ¿Cuáles son los factores que los afectan?

El costo de hacer llegar el producto al cliente final.

Se trata básicamente de las comisiones o premios que obtienen los corredores de seguros, sean estos internos o externos.

La prima garantizada

En el modelo de prima garantizada, el valor de la mensualidad no varía durante todo el tiempo de vigencia del contrato de seguros. Esto significa que, si la primera mensualidad es de 70 dólares, la última, que puede ser la número 36, por ejemplo, igualmente será de 70 dólares.

Cuando la aseguradora ofrece prima garantizada, asegura que el valor no sufrirá ninguna modificación durante la vigencia del contrato, aunque varíen algunas condiciones, como el aumento del riesgo, por ejemplo.

La prima revisable

En contraposición, en el modelo de prima revisable, la compañía de seguros tiene la potestad de modificar el valor de la prima mensual, una o varias veces, durante el tiempo de vigencia del contrato.

Son varios los factores que hacen que la compañía de seguros aumente o disminuya – porque este evento también se puede dar -, el valor de la prima. Una de ellas puede ser el incremento en los niveles de riesgo cubiertos por la póliza.

Es común que, en los contratos de seguro de vida, el aumento en la edad del cliente, haga que proporcionalmente aumente el valor de la prima, cuando se ha pactado una prima revisable.

Prima garantizada o prima revisable – ¿Cuál es la mejor opción?

Si consideramos un contrato a largo plazo, de más de diez años, convendría pactar una prima garantizada, aunque esta, inicialmente sea costosa, pero que, con el correr de los años resultará conveniente para el cliente.

El mejor ejemplo sigue siendo el de los seguros de vida. Para una persona joven, de veinte hasta treinta y cinco años de edad, puede resultar interesante contratar un seguro de vida que, en razón de su edad, tenga una prima económica, bajo la modalidad de prima garantizada.

En otro tipo de seguros, la prima revisable puede ser una buena opción, en la medida en la que el riesgo cubierto disminuya en su incidencia. En teoría, los contratos de largo plazo resultan mejor para el cliente bajo la figura de la prima garantizada, en tanto que los de corto plazo – tres años o menos -, funcionan mejor con una prima revisable.

Definir la modalidad de prima que resulta más conveniente para el cliente, depende de la situación particular de cada uno de ellos, pero también de la incidencia del riesgo asegurado y del tiempo de validez del contrato.

La mejor asesoría, sin duda te la podrá brindar tu asesor de confianza, en tu compañía de seguros. No dudes en consultarlo en Oriente Seguros